Saturday, October 18, 2008

Testimonios que me llegan.

Me impresiona mucho la gente que toma valor de sus experiencias más difíciles y las comparte.

Hoy me sucedió dos veces. Después de jugar al golf, uno de mis amigos contó a quien estábamos con él, qué había significado para él la muerte de un hijo de dos años de edad. El niño había nacido con una enfermedad neurológica grave y le dedicó una enorme atención, pero un día, mientras dormía en sus propios brazos dejó de existir. Mi amigo nos contó que tras un momento de desesperación, había podido dar vuelta la página, y desde entonces siente que es mejor padre, mejor esposo, mejor persona. Ha logrado superar su montaña, está en paz consigo mismo y vive una vida plena de energía y amor.

Ese mismo día, otro de mis amigos cuya esposa había fallecido dos meses atrás tras una dolorosa enfermedad, me contó cómo había cumplido con su último deseo. Había llevado sus restos a un lago en el sur de la Argentina donde ellos habían pasado momentos imborrables, y rodeado de un grupo de amigos y familiares había arrojado sus cenizas a un arroyo que corría hacia el lago. Luego, algunos dijeron algunas palabras en memoria de su mujer y después en paz y alegría todos comieron un asado. Con lágrimas en los ojos me contó la enorme emotividad que rodeó ese acto y lo bien que él se sintió. Ahora, mi amigo con serenidad está tratando de reencontrarse consigo mismo y tomar fuerzas para seguir adelante con su vida.

Testimonios increíbles que me llegan mucho, después de una mañana de golf.

4 comments:

Anonymous said...

Pedro: me meti en tu blog. me resulto sincero y frontal: Para vos y para el resto de los mortales. Me conmovio mas que hayas podido soportar 36 años en llegar a la cima, que la historia de los 72 dias en la montaña, que hoy, con todo respeto, hasta me parecen insignificantes.Tu compromiso en hablar del tema me dispara valor para poder encarar mis entumecidos secretos. Tener la oportunidad de poder compartir momentos de la vida con Ustedes es un lujo.

GRACIAS

Unknown said...

Querido Pedro, luego de leer tu blog, y reflexionando, pienso que la vida tiene experiencias que nos parecen normales y otras increibles, pero todas nos aportan algo,las elaboramos conciente o inconcientemente y con el andar en nuestra vida, en nuestros hechos cotidianos, desbordamos hacia el projimo, palabras, gestos, miradas,o a veces solo presencia, todo eso que nos constituye, creo que algo de eso es la trascendencia del ser humano, algo de eso es lo que sucedio en el golf.
Gracias por ese momento
Gustavo Grandi

Anonymous said...

Pedro acabo de ver tu blog y me quede impresionado.
Me vienen a la cabeza 2 reflexiones, la primera es haberte conocido un tiempo sin conocer esta fuertisima experiencia tuya y no darme cuenta muy por el contrario siempre me parecio que estabas llevando la vida con absoluto control, con mucha seguridad y como si nada pudiera tocarte. Tal vez fue por tu experiencia, no se.
Lo que si me alegra enormemente es ver que en esta etapa de tu vida abris algo muy profundo tuyo y lo compartis lo cual es un regalo para muchos de nosotros.
Hay un concepto que por ahi mencionas que a mi no me es extraño y es el tema de como la mente bloquea ciertas cosas. Debe ser como una especie de mecanismo de defensa que hace que no puedas recordar o se te dificulte recordar cosas que te provocaron dolor.
La segunda reflexion es mucho mas superficial "que grande internet" creo que para que me traspasaras toda esta informacion, personalmente, te hubiera tomado una tarde? un dia o?. Con la ayuda de la tecnologia esto se hace en un muy reducido tiempo, mezclando comentarios con imagenes y lo comparten si asi lo desean cientos de personas. La gran duda es que pasa a partir de internet, que pasa a partir del face book con la comunicacion entre las personas. Lo veremos con nuestros nietos, remplazara el messanger al abrazo?.
Un abrazo y gracias por compartir

Alejandro said...

Pedro, agradezco haber conocido tu Blog a traves de tu compañero de Golf Gustavo. Siempre tuve muy presente el tema de los Andes y estimo que debe ser porque lei el libro Viven cuando tenia 12 años, hoy día tengo 43.Leer tu blog me resulta un placer, me brinda mucha paz y me doy cuenta de que no hay que hacer problemas donde realmente no hay problemas, tenemos que subir la montaña.
Gracias.